Resorts de playa
Benicarló
Pueblo árabe del siglo XII, controlado por Peñíscola y que más tarde fue conquistado por Jaime I y ha evolucionado hasta convertirse en el Benicarló de hoy en día. A lo largo de muchos siglos, el centro de la ciudad ha sido provisto de varios edificios fascinantes.
Centro de la ciudad
- Iglesia de San Bartolomé (Plaça de Sant Bartomeu)
Vale la pena mencionar especialmente la Iglesia barroca de San Bartolomé, construida durante la primera mitad del siglo XVIII (1724-1743). Esta iglesia tiene un campanario octagonal separado. El altar se completó en 1818. Dentro hay un museo con arte gótico.
- La ciudad también tiene una agradable plaza principal (Plaça de la Constitució) con vegetación verde a unos 150 m al sur de la iglesia (donde está situado el centro de información turística).
- Formando un triángulo con la iglesia y la Plaça de la Constitució, encontrarás el Mercado Central de Benicarló (Mercat Central), que consiste esencialmente en un mercado de comida interior típico, con una gran variedad de verdura fresca, fruta, pescado, carne, pan e incluso flores. (Carrer de Pius XII, 10)
El puerto
Históricamente, Benicarló ha sido un importante puerto pesquero y todavía es muy activo. El puerto de Benicarló es un lugar agradable donde pasar el tiempo, tanto de día como de noche. Desde una gran variedad de buenos bares y restaurantes puedes disfrutar viendo la ajetreada flota desembarcando su pescado en el centro de subastas (sobre todo por la tarde) o los elegantes yates del puerto deportivo adyacente.
Al lado del puerto, hay una larga playa que llega en dirección sur hasta Peñíscola.
Playa del Morrongo
Justo al lado del puerto, encontrarás la Playa del Morrongo, de bandera azul. Como está cerca del puerto, hay una buena selección de bares y restaurantes cerca a la playa.
Jardin del Papagayo
El Jardín del Papagayo alberga docenas de especies diferentes de loros, guacamayos y cacatúas en grandes pajareras. Puedes comprar semillas o frutos secos y dar de comer a los pájaros, dentro o fuera de las pajareras. También hay flamencos, canguros y mariposas. Los animales están bien cuidados. Hay senderos de aventura y carreras de obstáculos por todo el parque. También hay pájaros entrenados que hacen trucos durante los espectáculos del parque. (Camí de la Ratlla del Terme)
Basseta del Bovalar
Situado a 4 km del centro de la ciudad, cerca del camino desde Peñíscola, la Basseta del Bovalar es un parque natural muy apreciado por los locales. La Basseta (“pantano”) está rodeada de una exuberante vegetación verde única, típica de humedales.
Alcossebre
En este encantador pueblo costero te encontrarás rodeado por el mar Mediterráneo y la reserva natural montañosa de la Sierra de Irta.
Alcossebre cuenta con diez kilómetros de costa, con cinco playas principales de calidad, cuevas y humedales. Ofrece actividades terrestres y acuáticas.
Sin duda, apreciarás las vistas desde la reserva y desde la Ermita de Santa Lucía.
Oropesa Del Mar
Desarrollada alrededor de su bahía, Oropesa Del Mar tiene una buena selección de playas y cuevas, una estructura turística moderna y un barrio antiguo bonito y bien conservado.
Ve a Morro de Gos si quieres disfrutar de una playa agradable con agua clara. Tiene una buena provisión de restaurantes y bares y un puerto deportivo entretenido que visitar.
La Torre del Rey
Tras hacer frente a ataques piratas frecuentes durante las primeras décadas del siglo XV, Fernando I de Aragón decidió construir una red de muros y torres defensivas. Todavía se conservan algunas torres. Una de estas torres es probablemente el monumento más icónico de Oropesa: la robusta Torre del Rey, una torre de guardia (situada en el Cabo de Oropesa, cerca del faro, a 20 metros sobre el nivel del mar y a 40 metros del mar). Es una pieza de arquitectura imponente, que combina la pragmática militar con la estética arquitectura renacentista. La construcción de la torre se inició en 1413 y probablemente se terminó en 1428. En 1534, la torre sufrió varios cambios importantes hasta convertirse en la torre que vemos hoy en día.
Jardin Encantado
El Jardín Encantado es un mundo de ilusión y magia, árboles que se mueven y hablan, figuras, actores que interactúan con el público y espectáculos estupendos. Hay fuentes y cascadas, todo en un entorno rodeado por decenas de miles de flores.
Benicàssim
A unos minutos en coche al sur de Oropesa del Mar se encuentra otro pueblo de playa único: Benicasim (Benicàssim en valenciano).
No es necesario profundizar mucho para descubrir el origen árabe de Benicasim. El nombre de la ciudad deriva del árabe Banū Qāsim o “La tribu de Qāsim”. Esta tribu controlaba el área desde el castillo del siglo X que ahora conocemos como Castillo de Montornés, antes de que fuera expulsada por Jaime I en 1234. El castillo está situado en una empinada colina a 4 kilómetros de la ciudad, a una altura de 500 metros.
Entre los locales, Benicasim es conocido por acoger uno de los principales festivales de música de España.
La Ruta de las Villas
A finales del siglo XIX y principios del siglo XX, las familias ricas de Valencia y Castellón contrataron algunos de los arquitectos con más renombre de la época para construir un buen puñado de villas de diferentes estilos a lo largo de la bahía. La villa más antigua que se conserva, conocida como “la Biarritz valenciana”, es Villa Pillar, construida en 1860. Se han catalogado 51 mansiones y 19 señales indicadoras.
El paseo por la rambla es agradable, con la playa y el Mediterráneo a un lado y las villas al otro. La única villa que no es de propiedad privada es Villa Elisa, que a veces se abre al público. El resto de villas tienen que admirarse desde el exterior.
(Ubicación: situada a lo largo del Paseo Pilar Coloma y el Carrer Bernat Artola, dividida por los jardines Comín, popularmente conocidos como Limbo. La ruta de las villas va de la Torre de San Vicente al Hotel Voramar).
Via Verda (o Vía Verde)
Antes o después de pasear junto a las villas, puedes disfrutar de una caminata ligeramente más larga por la Vía Verde, que pasa por el Hotel Voramar (cruza la Avenida Barcelona primero, justo al lado del hotel).
La Vía Verde es la antigua vía del tren, que pasaba entre Barcelona y Valencia. Es ideal para ir en bici (son 11 km ida y vuelta si decides ir hasta Oropesa). Puedes alquilar bicicletas tanto en Benicasim como en Oropesa. Pero también se puede recorrer andando perfectamente.
Esta ruta costera ofrece un paisaje cautivador, vegetación verde virgen, muchas áreas abiertas con vistas al mar espectaculares y un litoral rocoso, una torre de guardia, túneles, puentes y altos pasos que rodean acantilados.
Desierto de las Palmas
El Desierto de las Palmas es un parque natural protegido cerca de Benicasim.
Ofrece unas vistas a la campiña, las planas de Castelló, la bahía de Benicasim y el mar que verdaderamente quitan la respiración. En un día claro incluso se pueden ver las Islas Columbretes.
La palabra “desierto” debería interpretarse de manera figurada. Hace referencia al estilo de vida ermitaño y solitario de la orden de los carmelitas descalzos, una orden mendicante que habitó la zona durante siglos. Los carmelitas descalzos eran una branca de la orden carmelita original, un puñado de hombres devotos, antiguos peregrinos y cruzados, que se establecieron alrededor del año 1155 en el Mount Carmel, en el noroeste de Israel. El Desierto de las Palmas sirvió como refugio espiritual a los carmelitas descalzos y como lugar donde ubicar del monasterio y la iglesia. El monasterio fue construido principalmente durante el siglo XVIII.
Puedes visitar las ruinas del monasterio y del castillo de Montornés. El castillo está situado en un pico empinado, en una de las montañas del parque natural. Originariamente una fortaleza árabe del siglo X, construida sobre restos romanos, fue reforzada y ampliada tras el fin de la reconquista de Jaime I. Fue abandonada en el siglo XVII.
Puedes terminar tu visita al parque en alguno de los restaurantes cercanos a la cima, que tienen unas vistas maravillosas y buena comida.
Castellón de la Plana
La capital de provincia de Castellón ofrece todo tipo de actividades y atracciones.
Tiene un centro de la ciudad cautivador con sensación de museo al aire libre y un diseño urbano, desarrollado a lo largo de muchos siglos, que se remonta a la Edad Media. La ciudad tiene gran cantidad de plazas y jardines encantadores, naranjos, viejas mansiones y bonitas iglesias.
Parque Ribalta
Este parque es el sitio más simbólico de Castellón. Es un antiguo parque público de la ciudad que preserva una gran variedad de plantas. Fue diseñado a finales del siglo XIX para la ocasión de la inauguración de la vía de ferrocarril Valencia-Sagunto-Castellón. La ciudad quería crear “un paisaje boscoso” cerca de la estación de trenes para impresionar a los visitantes.
El diseño representa el gusto del siglo XIX. Los caminos que se cruzan los unos con los otros se han conservado hasta hoy en día, formando pequeñas plazas donde se sitúan el pabellón de música y el estanque. Hay varios monumentos esparcidos por el parque. Es un lugar fantástico para relajarse.
Parque Natural “Islas Columbretes”
Las islas Columbretes forman un pequeño grupo de islas volcánicas a unos 56 km de la ciudad. Las visitas están estrictamente controladas debido a que tienen un ecosistema frágil y único, y se organizan desde el centro de Castellón de la Plana, en el planetarium.
(Planetari de Castelló: Paseo Marítimo, 1).
La Playa del Pinar
Esta amplia playa con arena fina dorada debe su nombre al bosque de pinos que hay cerca, gran parte del cual ha sido preservado y es conocido como el Parque del Pinar. El parque hace que la playa sea todavía más apetecible. La playa empieza en el límite norte del puerto de Castellón. Hay muchas instalaciones deportivas y de otros tipos, parques infantiles, etc. Hay un campo de golf y pistas de tenis, así como un planetarium.
La Playa de Gurugú
Esta playa es comparable a la Playa del Pinar y está igualmente cuidada.
Onda
Aunque no es un centro vacacional de playa, Onda está situada a solo 20 km hacia el interior desde la costa y desde Castellón de la Plana. Pero es, definitivamente, otra joya oculta de la región. La época en que la ciudad estaba sometida al control árabe (siglos X – XIII) dio al barrio histórico su diseño urbano.
Castillo de Onda
El principal lugar de interés de Onda es el castillo. El castillo fue construido por los musulmanes en el siglo X. La estructura original está enterrada bajo varias construcciones llevadas a cabo a lo largo de los siglos. En 1238, Zayan, el último rey musulmán de Valencia, se rindió ante el rey Jaime I.
El castillo se hizo famoso por su gran tamaño, recibiendo el nombre del “castillo de las 300 torres”, ya que se decía que “tenía tantas torres como días tiene el año”. Desde entonces, desempeñó un papel estratégico importante durante varios episodios de la historia de España. Actualmente, alberga un museo de la historia local con hallazgos arqueológicos.